¡Anda pallá jigoseco!, ¡Anda pallá jigo seco!

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¡Anda pallá jigoseco! → 1- Expresión que se usa para advertir de que lo que acabamos de oír es una auténtica tontería (¡Vaya por Dios!) 2- Se usa también para expresar asombro, fastidio o indignación (¡Vaya, hombre!). 3- Una forma de cantar victoria ante algo que te ha costado sudores y hasta enfado (¡Por fin! ¡La madre que lo parió!). 4- Una forma de rechazar a alguien o mandarle a paseo (¡Que te den! o ¡Vete porây!).

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1- Construcción o elemento vertical que sobresale del suelo: una estaca, un trozo de un muro derruido, montón de tierra o piedras, etc. siempre que predomine la dimensión vertical sobre la horizontal. 2- A modo de exageración, astilla, espino, etc. que se te clava en la carne. 3- Uña que se encarna y se clava en la carne del dedo.

1- Trozo de hilo que se desprende de una tela. 2- Por extensión, cualquier cosa que tenga apariencia semejante, como las fibras sueltas de la carne o de las nubes.

Fila de cosas (nunca de personas).

Persona o cosa larga y estrecha (normalmente con un toque despectivo, como que esa forma no es la más apropiada o es poco definida).

Más alto que un jilorio.

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Emitir los hipidos y gemidos entrecortados característicos de quien va a estallar en llanto (tal vez sin llegar a ello).

1- (tr.) Hincar, clavar algo, especialmente en el suelo. 2- (prl.) Comer o beber alguna cosa. 3- (col. prl.) Referido al sexo: penetrar (jincálsela).

Jincal-la.

Parecel un jincatel → Estar muy delgado.

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1- Especie de gimoteos, mezclando una especie de hipos, que hacen los niños cuando lloriquean. 2- Gemido o sonido sibilante en la respiración. 3- Sonido de un hipo, especialmente si es fuerte.

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Que tiene hipo durante un rato prolongado.

1- Mueca o gesto extraño o extravagante que se hace con la cara. 2- Movimiento extraño y alocado que se hace con el cuerpo, como suelen hacer los niños sin motivo alguno.