En peraleo el verbo cocinar se usa muy poco y sólo por influencia del estándar (es de suponer que hace tres generaciones no se usaría en absoluto). El verbo aliñar tampoco se usa. En ambos casos se dice guisar. Por esa misma razón en peraleo el guiso es tanto lo que echamos a una comida para añadirle sabor (ajo, cebolla, laurel, pimienta...) como lo que echamos a la ensalada para aliñarla (aceite, sal, vinagre...).
1- Mocho de la fregona o también la fregona entera.
2- Trozo de tela o cualquier otro material que, sujeto al extremo de un mango sirve para pintar o sacudir el polvo.
3- Hisopo, utensilio que se emplea en las iglesias para dar o esparcir agua bendita, consistente en un mango de madera o metal, con frecuencia de plata, que lleva en su extremo un manojo de cerdas o una bola metálica hueca y agujereada.
4- Persona, especialmente mujer, que tiene el pelo mojado y desaliñado.
Husmear, curiosear, andar metiendo la nariz en todas partes.
Persona que come demasiado y engulle con presteza y voracidad cuanto le dan.
Persona afectada, melindrosa y exquisita.
1- Gorrión común.
2- Forma cariñosa de referirse a los niños que por su pequeñez o su viveza (o ambas cosas) se pueden comparar con un gurriato.
3- En ocasiones puede usarse para referirse a niños de manera despectiva, con la idea de que "con lo pequeño que es, ¿cómo se atreve?"
Apóyanos con tu firma para salvar el Dolmen de Guadalperal y también para salvar el retablo esgrafiado de Peraleda.