1- (coloquial) Niño muy inquieto y activo.
2- Perindola, pequeña peonza que se hace girar con los dedos.
- (dicho de cosas) Completamente lleno.
- (dicho de personas o animales) Muy harto, que ha comido tanto que ya no le cabe más.
Conjunto de hojas apretadas de forma redondeada que forman las hojas de algunas plantas como la col, la lombarda o algunos tipos de lechuga.
1- Pomposo, ostentoso.
2- Hueco e hinchado.
3- (dicho de personas) Muy arreglado y peripuesto. (dicho de cosas) Muy lustroso y vistoso.
Forma de montar en una caballería, típica de mujeres, consistente en poner las dos piernas al mismo lado.
1- Imaginar o recordar algo de forma vívida.
2- Aparecer de la nada, como en el caso de espíritus, santos, etc.
3- Parecerse mucho a alguien, sobre todo en el aspecto físico.
Repetir, volver a la boca el sabor de lo que se ha comido (generalmente alimentos grasos) acompañado de una sensación desagradable.
1- Tipo de criadilla de tierra u hongo cuyo aspecto recuerda al requesón (sustantivo).
2- Persona pesada y cansina que no hace más que dar la lata (adjetivo).
Rescoldo, restos de brasa y cenizas que quedan una vez apagadas las llamas de una lumbre o del brasero.
1- Producir una sensación parecida a la causada por quemadura.
2- (dicho de una parte del cuerpo) Enrojecerse con mayor o menor inflamación cutánea.
3- Sentir culpa por algo que se ha dejado de hacer o que se ha hecho mal.
1- (referido a la cama o a la almohada) Extrañar, no dormir bien en una cama diferente a la tuya.
2- Dícese cuando los niños son ariscos con alguna persona que conocen, pero no tienen trato habitual.
Apóyanos con tu firma para salvar el Dolmen de Guadalperal y también para salvar el retablo esgrafiado de Peraleda.