Más negra que una morcilla.
Cardenal, Moratón
Cardenal, mancha morada en la piel generalmente a causa de un golpe.
Ninguno, Nadie
La palabra "nadie" prácticamente no se usó en castellano hasta el siglo XV. Anteriormente se usaba siempre "nenguno" o "ninguno", lo que explica por qué el peraleo -que se separó del estándar en el XIV- tiene una mayor frecuencia de uso de "nenguno" y menor de "naide" (nadie) que el estándar.
Sirve tanto para personas como para cosas y es muy frecuente en peraleo usarlo pospuesto al sustantivo para enfatizar (Yo no tengo priesa nenguna), algo muy poco frecuente en español actual y bastante normal en el castellano antiguo. Pero si lo posponemos, siempre se pone en singular (No me jagas bromas = No me jagas broma nenguna).
Eso y ná, pariente del tío Nenguno
Se dice de algo tan escaso, que prácticamente no es nada.
Aunque
Forma enfática de "aunque" que podemos encontrar tanto en oraciones afirmativas como en negativas.
En el estándar también se usa la forma "ni aunque", pero sólo en oraciones negativas: "No te lo daré ni aunque vengas".
Lo que no se puede hacer, como sí hace el peraleo, es usarlo en oraciones afirmativas para enfatizar: "Me lo via compral ni anque sea mu caro".
Esta forma, "ni anque", casi siempre se apocopaba en "ninque".
Patrás, Atrás, Dios → Forma enfática añadida a una negación equivalente al estándar: en absoluto, para nada, de ningún modo.
Nidal
Lugar donde las gallinas ponen los huevos.
Almiar, Niara, Nial
Montón grande de paja o heno al aire libre, formado frecuentemente en torno a un palo vertical para conservarlo todo el año.
Nicho
Nicho, hueco hecho en la pared para alojar cadáveres.