sustantivo, masculino
En español: Morcilla
Embutido que se hace con sangre de cerdo, cebolla y gordura que posteriormente se cuece.
Ver Chofe, Mondringue, Morcilla1, Tripas1
1. M'han dao ena matanza un cachino mondongo y qué güeno m'ha sabío.
2. Ya no me quea mondongo pa echal en el puchero, asín es que echaré un poquino morcilla.
Comentarios:
Mondongo en castellano son los intestinos y la panza de las reses, especialmente del cerdo. De ahí la expresión castellana "hacer el mondongo" (hacer embutidos), pues para hacer chorizos, morcillas, etc. se usaba la tripa del cerdo para embutir.
En Salamanca y algunas otras zonas, "el mondongo" son los embutidos en general, pero en Peraleda se usa sólo para referirse a un tipo concreto de morcilla, la de sangre. Lo que en Peraleda se llama morcilla, sin embargo, es un embutido hecho a base de calabaza, arroz y gordura y no se cuece.
El mondongo no es un embutido que se someta a desecación como la morcilla o el chorizo, se cuece en agua caliente sin que llegue a hervir y se come en el mismo día o como mucho en un par de días.
Ver palabras relacionadas: Gastronomía Matanza Sociedad
Origen: Latín. Nos viene del castellano antiguo. Es castellano con variación de significado. Se usa en nuestra zona.
Etimología:
Mondongo (intestino) procede de mondejo, con el mismo significado, que a su vez deriva de bandullo o bandrullo (vientre o tripas), derivado del latín ventriculus (vientrecillo).
La palabra mondongo la encontramos escrita por primera vez en 1580, y morcilla poco antes, justo en 1492, así que no está claro cuál de ellas es más antigua. Mondongo aparece por entonces con el significado de morcilla (de sangre). En el 1591 encontramos un romance en donde se dice:
"Por este amable metal
En maridable consorcio
De bien diferentes sangres
He visto yo hacer mondongo".
Y en 1597 Quevedo, en una de sus poesías, nos dice:
"Por lo noble es muy ilustre
por lo pesado, muy grave
enamorado mondongo,
es todo tripas y sangre".
En 1600 encontramos esta poesía anónima que casi parece escrita por un peraleo:
"No me case mi madre con hombre gordo,
que, en entrando en la cama, güele a mondongo.
No me case mi madre con hombre flaco,
que me mete los huesos con el carajo".
Apóyanos con tu firma para salvar el Dolmen de Guadalperal y también para salvar el retablo esgrafiado de Peraleda.