1• Tener sueños extraños o raros, sin que tengan que ser necesariamente terroríficos o angustiosos, como en el caso de una pesadilla.
2• Sopor o sueño invencibles.
Comentarios:
La acepción 2 se da por contaminación con nuestra palabra soñarrera.
Campos semánticos: Sensaciones
Origen: Latín. Nos viene del castellano antiguo. Es castellano desaparecido. Se usa en el sur de España.
Etimología:
Del latín somniare (soñar, tener ensueños) de donde procede soñar y la derivación inusual soñaêra. Hemos documentado esta palabra en algunas partes del sur de España y también en México (soñadera), así que debió existir en el castellano antiguo y perderse después en el estándar.
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