verbo, pronominal
En español: Apearse, Bajarse
Bajarse de un sitio cualquiera, especialmente desmontar una caballería, carruaje o automóvil.
1. Pos andaban tos subíos al poyo la plaza jadiendo el ganso, se sapearon tos a la vez d'un sarto y ¡pumba! al suelo que jué el poyo con ellos y a la mî niña el pie aplastao.
2. Yo namás llegal me sapeé del burro y lo metí pa la cuadra y me vine pa casa y aquí estoy, que nô he bebío na, mujel, que la tabelna ni la he golío.
3. ¿Pero qué jades subío ena mesa? ¿Estás tonto? Sapéate. Ya. Ara mesmo te digo.
Comentarios:
Además del cambio de forma, la peculiaridad en nuestro dialecto es que su uso no se restringe a la idea de desmontar, sino que se usaba con mucha frecuencia para referirse al acto de bajarse de cualquier sitio siempre que baste con bajar el pie o dar un pequeño salto (uno se puede sapeal de la silla, pero no de un árbol, que eso sería "abajalse del árbol").
Ver palabras relacionadas: Acciones humanas
Origen: Latín. Nos viene del castellano antiguo. Es castellano con variación de forma y uso. Se usa en nuestra zona.
Etimología:
Del latín vulgar *appedare, derivado de pes-pedis (pie) que dio la forma apearse (desmontar de una caballería, carruaje, etc.) a la que el peraleo añade una S inicial.
Esta S probablemente proceda de una primitiva forma *desapearse, con el prefijo dialectal des-, que puede ser simplemente intensivo, y que daría *esapearse. Al quedar la E inicial muy lejos del acento se habría debilitado y perdido, quedando la actual forma sapealse.
Otra posibilidad, menos probable, sería que la S provenga de formas reflexivas (se apeó > s'apeó > se sapeó), y de esas formas se extendiera al resto de la conjugación.
Apóyanos con tu firma para salvar el Dolmen de Guadalperal y también para salvar el retablo esgrafiado de Peraleda.