verbo, transitivo
También: Jacel
En español: Hacer
1. Y aguárdate, que jade... que jadía menos rato que s'había dío ella d'ahí que jades tú, que jade qu'estás hablando conmigo ahora.
2. Me voy, helmana, que aquí ya no jago na, namas qu'estorbal.
3. ¿Qu'andas jadiendo a estas horas pol la calle?
4. Hijita, ¿pero qué quieres que yo le jaga? si no pueo jadel na agora.
Ver palabras relacionadas: Verbos irregulares
Origen: Latín. Nos viene del asturleonés. Es castellano con variación de forma. Se usa en Salamanca.
Etimología:
Proviene del verbo hacer, que en castellano antiguo se decía fazer (del latín facere). La F inicial latina pasó a ser aspirada. En el siglo XIV se perdió la aspiración, pero en algunos lugares como Peraleda se mantuvo.
La Z se pronunciaba en el XIV /ds/, donde la S sonaba vibrando.
En el siglo XV se produce el llamado "reajuste de sibilantes", donde /ds/ pasó a pronunciarse D, así que fazer → /jadser/ → jader → jadel.
Eso sobre todo en la parte leonesa. En la mayor parte de Castilla este verbo sufrió un ensordecimiento, así que /ds/ pasó a /ts/, y la evolución de /ts/ es diferente, pues nos da el sonido Zeta, así que la evolución en Castilla sería así: fazer → façer /jatser/ → jacer. Llegados a este punto se produce la divergencia entre peraleo y estándar. En peraleo jacer → jacel, y en el estándar jacer → hacer.
En algunas partes castellanas no se produjo ese ensordecimiento de la Z, y evolucionó a D:
El S.r Diego Velazquez salió de M.d para la Jornada de fuente rauia, a hader el aposento de su Mag.d, á 7 de Abril de 1660. (Gastos del viaje a Fuenterrabía, 1660).
En nuestra zona convivieron las tres formas: jadel, jacel, hacel.
Apóyanos con tu firma para salvar el Dolmen de Guadalperal y también para salvar el retablo esgrafiado de Peraleda.