sustantivo, masculino, cultismo
También: Cautivadol, Cautivadores
En español: Cultivador
Apero de labranza consistente en unos ganchos al final de los cuales se insertan piezas en forma de triángulo o punta de flecha. Se utiliza para limpiar de hierbas la parte de tierra entre los surcos en los que crece la cosecha.
1. A vel si jago un vagal y paso el cautivadol por un cachino que tengo sembrao de algodón.
2. S'han enganchao los cautivadores en un montón de raíces y cro que s'ha roto uno.
Comentarios:
En ocasiones se utiliza en plural (cautivadores), aunque se trate de un solo utensilio, debido a que lleva varios ganchos, cada uno de los cuales se considera también un cultivador. La D intervocálica no se pierde.
Aunque la forma en singular puede terminar en -L, por la vacilación típica del peraleo entre las formas -R y -L en final de sílaba, en plural siempre se usa la forma cautivadores y no cautivadoles.
Ver palabras relacionadas: Agricultor Agricultura Maquinaria y aparatos Utensilios de agricultura
Origen: Latín. Nos viene del español. Es castellano con variación de forma. Se usa en Peraleda.
Etimología:
Deformación del estándar cultivador (instrumento agrícola destinado a cultivar la tierra duante el desarrollo de las plantas) en la que la L de CUL- ha diptongado en -AU-. Deriva del verbo cultivar, que viene de cultivo, del latín medieval *cultivus.
Aunque la desaparición de la -D- intervocálica en las sílabas finales es norma común en el peraleo, en este caso lo habitual es pronunciarla (cautivador/ol y no cautivaor/ol), probablemente porque al ser una maquinaria relativamente moderna, se tomase la palabra con la D original.
Curiosamente hay que resaltar que en peraleo no se utilizan ni el verbo cautivar ni cultivar. Para designar esa acción se recurre siempre a la perífrasis pasar el cautivadol o los cautivadores.
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