sustantivo, femenino, plural
También: Cotorras
En español: Churretes
Suciedad en la cara o en el cuerpo en forma de churretes o manchones.
Ver Burriagas, Cascarrias, Churre
1. Deja de llorar, mi niño, y límpiate esas cotorreras, que me paces un mêndigo.
Origen: Latín. Nos viene del castellano antiguo. Es castellano con variación de significado. Se usa en Peraleda.
Etimología:
Cotorrera aparece en el diccionario de la RAE con el significado, aparte de hembra del papagayo, de prostituta. Quizá fuera la no excesiva limpieza en tiempos pretéritos de estas trabajadoras del sexo, lo que llevase a la identificación de la suciedad con su nombre.
De ser así, esta palabra viene del latín coto (precaución, defensa), de donde sale nuestro coto de caza. Añadiendo el sufijo -arro (despectivo) dio cotarro, que era un recinto o corral donde se daba albergue nocturno a mendigos y vagabundos. Añadiendo el sufijo -era (procedencia) se formó cotarrera para referirse a una mujer del cotarro. De ahí surgió la variante cotorrera, que ya en el siglo XVI empezó a usarse para referirse a las prostitutas, sentido que aún hoy recoge el diccionario de la RAE.
Como curiosidad, por esa misma época surgió la variante sin sufijo, cotorra que, si al principio significaba igualmente prostituta, rápidamente pasó a significar charlatana, mujer que no para de hablar. Cuando se conoció a unos pájaros exóticos que aprendían a decir palabras y las repetían sin cesar, se les llamó también cotorras por analogía.
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