adjetivo
En español: Áspero, Rugoso
Áspero y rugoso al tacto, con la consistencia de las carrascas. También aplicado a tejidos que han perdido su suavidad, tales como toallas, jerseys, etc.
Ver Carrasca, Carrascúo2
1. Nô te pongas a laval en esa piedra, que es mu carrascúa y te v'a ezaleal las roíllas.
2. Via tiral esta tualla porque está toa carrascúa y ya raspa mucho al secalse con ella.
Comentarios:
Existe carrascudo en alguna zona de Aragón, pero con significado diferente. Sin embargo, en Canarias, carrascudo sí se utiliza con este mismo valor.
Ver palabras relacionadas: Sentidos Tacto
Origen: Prerromano. Nos viene del castellano antiguo. Es castellano con variación de forma y significado. Se usa en algunas partes de España.
Etimología:
Del castellano carrasca (encina pequeña), proveniente de la raíz prerromana kar- (encina) y el sufijo, también prerromano -esca (relacionado con).
En peraleo, se denomina carrasca a la hoja de la encina. Tiene pinchos y cuando se seca y cae al suelo cruje al pisarla. Algo carrascúo tiene similar consistencia y textura.
Una teoría más sobre el origen de esta palabra podría ser que venga del estándar cascarudo, aquello que tiene la cáscara gruesa. De hecho, en Oropesa, cuyo dialecto es muy similar al nuestro, se usa la forma cascarúo con el mismo significado peraleo. Podría ser que el peraleo hubiese alterado el orden de los fonemas (cascarúo→ carascúo) transformando posteriormente la R vibrante simple en vibrante múltiple (carascúo→ carrascúo).
Apóyanos con tu firma para salvar el Dolmen de Guadalperal y también para salvar el retablo esgrafiado de Peraleda.